martes, 29 de septiembre de 2009

Editorial del diario La Nación, Bs. As., 29 de Septiembre 2009

La ciencia económica ha trabajado intensamente para determinar cuáles son las medidas que contribuyen al crecimiento y cuáles lo impiden o hacen que los países retrocedan en su nivel de vida. Pero los economistas también avanzaron en otro campo que se ha denominado la economía y las instituciones. En esa área del saber han advertido cuáles son las condiciones institucionales que conducen a los países al crecimiento. La economía ya no se conforma con decir por qué los controles de precios son perjudiciales o por qué la emisión monetaria crea inflación, sino que ahora vuelca sus esfuerzos en definir el contexto institucional necesario para que las medidas produzcan mayor bienestar en la población.
Desde que Néstor Kirchner asumió el poder, recorrió el camino exactamente inverso al que grandes pensadores de la economía han propuesto como el más apto. La evidencia empírica lo ha confirmado, como lo muestran Irlanda, Chile, España y varios países de Europa central, entre otros.
En el campo económico, Kirchner no vaciló en destruir el poder adquisitivo de la moneda. Contrariando el artículo tercero de la Carta Orgánica del Banco Central, que establece que "es misión primaria y fundamental del Banco Central de la República Argentina preservar el valor de la moneda", no se vaciló en emitir pesos depreciando su poder de compra para sostener el denominado tipo de cambio competitivo, que finalmente dejó de serlo por efecto de la inflación.
El proceso inflacionario desatado por esta política derivó, primero, en los controles de precios, para luego acentuar la represión sobre el sistema económico, al recurrir a prohibiciones y cupos de exportación e incrementos en los impuestos a las exportaciones, y, finalmente, ante el fracaso de esas medidas, se optó por intervenir el Indec y destruir la confiabilidad de sus estadísticas, como si con esa medida la gente no advirtiera el alza en el costo de vida, el desabastecimiento de productos o los problemas de ocupación, pobreza e indigencia que padece.
Los casos más notables de destrucción económica son los de la industria láctea, la ganadería y el gas. Antes de que Kirchner llegara al gobierno, la Argentina exportaba productos lácteos, carnes y gas. Con sus políticas, estos tres sectores han quedado diezmados. De exportar gas pasamos a importarlo y, encima, el Gobierno ha rubricado un decreto por el cual se cobra un impuesto para financiar la importación de gas licuado mientras se mantiene en estado de desaparición la industria gasífera. En lo que hace a la ganadería, de continuar este rumbo, luego de perder mercados, la Argentina tendrá que importar carne si la población no reduce su consumo.
También destruyó el reducido mercado de capitales que todavía quedaba en la Argentina al confiscar los ahorros de los trabajadores que aportaban al sistema de capitalización privado. Ese sistema, con las correcciones que podía necesitar, permitía canalizar ahorro de largo plazo hacia el financiamiento del consumo y de la inversión.
Los métodos utilizados para controlar los precios, que lindan con el abuso del poder público, la confiscación de ahorros y el enfrentamiento con el campo para apropiarse de su renta son sólo algunos ejemplos de una larga lista de cómo el kirchnerismo fue minando la actividad económica y la seguridad jurídica.
Justamente, este avance sobre la propiedad privada mediante diferentes mecanismos ha producido una fuga de capitales de 43.000 millones de dólares, que equivalen al total de los depósitos del sector privado en el sistema financiero. La inseguridad jurídica provocada por tanto intervencionismo, el desprecio por los derechos de propiedad y la violación del derecho consagrado en la Constitución nacional de ejercer toda industria lícita fue la otra parte de la destrucción de la institucionalidad.
Desde el 25 de mayo de 2003, Néstor Kirchner y, ahora, su esposa, Cristina Fernández, jamás se concentraron en formular políticas públicas de largo plazo, eficientes y previsibles para construir condiciones de crecimiento sustentables. Por el contrario, todo se ha limitado a simples tácticas de corto plazo sin importar los efectos perjudiciales de largo plazo que pudieran tener. Estas tácticas se limitan a crear enemigos imaginarios o inventados por el matrimonio para acaparar más poder o salvar el escaso que le queda. Lo único previsible de Kirchner es su imprevisibilidad.
El veto de Cristina Fernández a la suspensión del pago de derechos de exportación para algunos partidos de la provincia de Buenos Aires que han sufrido una sequía histórica, la estatización de las transmisiones por televisión de los partidos de fútbol y el forzado proyecto de control de medios audiovisuales en nada contribuyen al progreso económico, pero confirman que, luego de la derrota electoral del 28 de junio, el poder remanente que le queda al matrimonio será utilizado para seguir destruyendo en vez de construir.




domingo, 27 de septiembre de 2009

Más de 1 millón para evitarles incómodos viajes a los K, según Perfil

En seis años de gestión, el matrimonio presidencial hizo del volar una actividad de culto.
De acuerdo a la información a la que tuvo acceso PERFIL, Néstor y Cristina Kirchner gastaron sólo en 11 vuelos, $ 1.033.361, diez de ellos realizados en uno de los aviones preferidos de la primera dama, un Challenger 601, matrícula LV-BPV, con capacidad para nueve pasajeros, valuado en 9 millones de dólares. Además de esa decena de viajes, hubo un viaje más que se realizó en un Cessna Citation de la compañía Royal Class, en el cual Néstor viajó hasta Río Gallegos por 35 mil dólares. ¿El avión? El mismo que usó Antonini Wilson y en el que viajaron los 800 mil dólares que iban destinados a financiar la campaña K.
El Challenger 601 es propiedad de International General Services SA, una empresa perteneciente al Grupo Exxel, un grupo inversor que administra fondos de inversión nacionales y extranjeros, que rompió el bajo perfil cuando se quedó con el imperio postal de Alfredo Yabrán y factura más de 500 millones de dólares anuales. I.G.S., su nombre de fantasía, es conducida por Cristian Fabian Assan, un operador de Juan Navarro, el creador del grupo Exxel.
De octubre de 2008 a julio de 2009, confirmó los diez vuelos realizados por los Kirchner a bordo del Challenger. En algunos casos, con gastos superiores a los 30 mil dólares por vuelo, la Presidenta y el Primer Caballero eligieron alquilar un avión privado en lugar de utilizar alguno de los cuatro aviones y un helicóptero que la Presidencia tiene a su disposición para los movimientos de la Presidenta y su familia. Para el alquiler de la aeronave, no hubo llamado a licitación y en todas las oportunidades se trató de contrataciones directas, con una particularidad, no todos los vuelos realizados por el mismo avión fueron facturados a la misma empresa. En la mayoría de los casos, si se hubieran utilizado los aviones de Presidencia, los costos habrían bajado algo más del 50%.
De acuerdo a lo que confirmó PERFIL, de todos los vuelos realizados por la máquina del grupo Exxel, cuatro fueron contratados a Aires Argentinos, una empresa de taxi aéreo, muy reciente en el mercado. El resto de los viajes corrieron por cuenta de I.G.S., la empresa de Juan Navarro. Fuentes de la Secretaría General de la Presidencia aseguraron que el Tango 01, como el Tango 02, 03 y 10, estaban en condiciones de volar en los momentos que se realizaron los alquileres. Como se desaconseja el uso del Tango 01 para distancias cortas, los disponibles, el Tango 02 y 03 (dos Fokker F28 de más de 20 años de antigüedad), no son “del agrado” de la Presidenta. Ahí está, según explicaron, la principal excusa para el alquiler del Challenger, uno de los preferidos de Cristina, junto con el Gulfstream de Eduardo Eurnekian, dueño de Aeropuertos Argentina 2000 (AA200). Fuentes del mercado aeronáutico explicaron que la empresa de Eurnekian sería, en muchos casos, una suerte de enlace entre las empresas y Presidencia. En el caso del Challenger, hubo vuelos que fueron pagados por AA2000, pero no hay precisiones si fueron volados por Presidencia.

¡Y después "deben" aumentar los impuestos porque no hay plata para hacer frente a las obligaciones contraídas por el Estado!

viernes, 18 de septiembre de 2009

Los fangosos caminos de la clase dirigente argentina

El debate sobre la polémica ley de radiodifusión propuesta recientemente por el matrimonio Kirchner ha generado las más diversas reacciones, no sólo de la clase política nacional.
La celeridad con la que se ha abordado esta cuestión -vaya uno a saber motivado por qué tipo de intereses- ha vuelto a crispar los ánimos de los ciudadanos como otrora ocurriera con la famosa “resolución 125” (conocida en medio del conflicto con el campo) y otras cuestiones patrocinadas por la dupla presidencial.
Entretanto el abogado y periodista Alejandro Sánchez Kalbermatten denunció penalmente al ex presidente Néstor Kirchner "actual mandatario de facto que intenta dirigir los destinos de la República Argentina sin la debida legitimidad de la investidura presidencial" e hizo responsable al ex presidente por "los numerosos actos de hostigamiento, intimidación y coacción desplegados hasta la fecha respecto del Grupo Clarín así como también de otros medios de prensa, periodistas y multimedios.
Y por si esto fuera poco, el Juez Federal Norberto Oyarbide comenzó el trabajo de recolección de datos para avanzar en la investigación por supuesto enriquecimiento ilícito de la presidente Cristina Fernández y su antecesor y esposo, Néstor Kirchner quienes, según la declaración patrimonial presentada a la Oficina Anticorrupción, los Kirchner admitieron tener en 2007 $17.824.941, mientras que la nueva presentación consignó bienes por $46.036.711.
Por el lado del peronismo disidente y cuya oposición al kirchenrismo –da la sensación- tiene más que ver con alcanzar nuevamente papeles protagónicos más que verdaderas discusiones de tipo ideológicas, la Senadora Hilda “Chiche” Duhalde declaró que el actual gobierno “nos lleva al modelo que ellos quieren que es el de (Hugo) Chávez”, en relación a la aprobación parcial de la controvertida ley de medios y que derivó en la media sanción por parte de la Cámara de Diputados.
Si el vaticinio de la Sra. De Duhalde se hiciera realidad, entonces sería necesario recordar que Hugo Chávez, presidente de Venezuela, acaba de promulgar una ley educativa, tachada de inconstitucional por la oposición, con el objetivo declarado de crear "la mujer nueva, el hombre nuevo" y "la sociedad socialista", norma que introduce el concepto de "Estado docente". Para ponerla en práctica Chávez ha creado 101.060 patrullas, integradas por dos millones y medio de militantes activos del partido oficialista que se desplegarán en los 25.000 colegios públicos y 7.000 privados del país. La misión de los patrulleros chavistas será la de “defender” la nueva ley de educación conformándose en Comités de Defensa de la Revolución, copiados del régimen cubano.
En Opiniones de Periodistas creemos que así como la oposición al kircherismo reclama consenso a través una propuesta vernácula de los “Pactos de la Moncloa” o, por su parte, el gobierno actual pretende unificar su idiosincrasia a través de referentes como Hugo Chávez, los argentinos aspiramos a que la clase dirigente establezca un marco de orden donde poder desarrollar nuestros potenciales como sociedad.
Creemos y seguimos insistiendo en la necesidad de respuestas propias a los problemas que nos aquejan como sociedad; y para ello la clase dirigente debería mostrar mayor madurez política, “bajar al ruedo” y tratar de entender con qué problemas debemos lidiar a diario los ciudadanos de a pie.
Las internas que se producen en las esferas de poder deberían quedar al margen para que los ciudadanos no seamos las víctimas propiciatorias de las mezquindades de la clase dirigente. Un “gueto” que en los últimos años ha demostrado que el único interés que representa es el de sus propios intereses (valga la redundancia)exigiendo cada vez mayores esfuerzos y sacrificios a una sociedad cada vez más despojada de recursos, cada vez más empobrecida.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Pactos de la Moncloa, ¿para Argentina?

Fiel a la tradición argentina la clase política nacional aspira a resolver los problemas del país con recetas importadas como si las circunstancias históricas, políticas y sociales en las que se pusieron en práctica esas soluciones, puedan ser trasvasadas a la excepcional realidad argentina.
Hace pocos días el matrimonio Duhalde lanzó a la arena política la idea de reeditar los “Pactos de la Moncloa” como el medio más apropiado para resolver la compleja realidad nacional. Sin embargo, creemos que es necesario dar una serie de informaciones básicas respecto del desarrollo de estos Pactos y las consecuencias que los mismos tuvieron para España.
Para el año 1973 la Península Ibérica sufría las consecuencias de una crisis inflacionaria sin precedentes en la historia del país agravada con el asesinato de Carrero Blanco –Jefe del Gobierno español- a manos del terrorismo etarra. Ambas situaciones generaban aún más incertidumbre a la realidad de entonces sumándose a ellas el delicado estado de salud de Francisco Franco.
Desde hacía 35 años la economía de España había crecido a una tasa promedio de 3,8% anual. Su producto interno bruto (PBI) per cápita había pasado de 2.300, en 1940, a 9.100, en 1976 (dólares constantes), y la esperanza de vida, había pasado de 50 a 73 años. Esta situación se producía en un marco de estabilidad de precios, sin desequilibrio fiscal y con un endeudamiento público que no superaba el 9% del PIB, y con una tasa de desocupación que nunca representó más del 4% de la población activa.
Así, aún con los defectos propios de un régimen como el franquista (1939-1975), Francisco Franco había comenzado a sentar las bases de una España moderna como reconoce gran parte de la sociedad de la Península; la Guerra Civil había dejado alrededor de un millón de muertos y nadie quería seguir enquistado a un pasado de dolor y tragedia para la sociedad española.
A eso había que sumarle la presencia del Rey Juan Carlos I –sucesor legal de Franco como Jefe de Estado- quien se había convertido en un punto aglutinante de las fuerzas políticas y sociales españolas y había nombrado presidente del Gobierno español a Adolfo Suárez quien hasta entonces se desempeñaba como Ministro franquista y estaba a cargo de la Falange Española Tradicionalista y de las JONS fundada por José Antonio Primo de Rivera en 1933.
En ese contexto, Adolfo Suárez con el consenso del Rey, de los jurisconsultos y las fuerzas políticas y sindicales españolas iniciaba una etapa en la cual se sancionaría una constitución más europeísta y moderna.
Se elaboró entonces un estatuto político que, aprobado por las Cortes elegidas durante el gobierno de Franco, posibilitaría las elecciones parlamentarias del 15 de junio de 1977, donde la UCD (el partido del gobierno, conformado por muchos funcionarios del régimen anterior) obtuvo una holgada mayoría de parlamentarios
La acuciante situación económica generó las firmas de los Pactos de la Moncloa para reestablecer el rumbo de la economía nacional así como una serie de medidas tendientes a lograr una mayor apertura social.
Sin embargo, en la práctica, estos pactos devinieron en una inefectividad manifiesta respecto de temas concretos referidos al papel del Estado en materia económica. Como consecuencia, su promotor, Fuentes Quintana, debió dejar el gobierno a los cuatro meses de su firma. Su pretensión de estatizar las compañías eléctricas que siempre habían estado administradas en forma privada, le costó su cartera.
Antes de cumplirse el año de la firma de los Pactos de la Moncloa se sancionó una nueva constitución, y se volvió a llamar a elecciones parlamentarias donde resultó vencedora la fórmula de la UCD. Sin embargo, la debilidad del gobierno, trajo como consecuencia la asonada militar del 23 de febrero de 1982, comúnmente llamado “tejerazo.”
Hemos creído necesario destacar la escasa importancia que tuvieron estos pactos en la vida política de España cuando en Argentina se comienza a hablar de ellos como la fórmula de la salvación nacional.
En definitiva, los hechos sobresalientes que condujeron a España al lugar que hoy ocupa en el concierto político y económico mundial está más relacionado con las políticas puestas en práctica por el régimen franquista (aversión al desequilibrio presupuestario; el plan de estabilidad y desarrollo adoptado en 1959 que fue profundizándose a través de los sucesivos gobiernos o la transición política realizada por quienes pertenecieron al franquismo) así como la madurez demostrada por los partidos políticos, las fuerzas sociales y los sindicatos españoles que se adaptaron a los nuevos tiempos sin revanchismos y dando un muestra de convivencia ciudadana que persiste hasta la actualidad.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Intolerancia y agresividad verbal

La sociedad argentina está demostrando un grado de intolerancia verbal que sorprende hasta al mejor estudioso de la Lengua. Como consecuencia de esta actitud la agresividad y la incapacidad para mantener un diálogo coherente se manifiesta hasta en las conversaciones aparentemente más superfluas.
Los medios de comunicación televisivos emiten programas en donde sus participantes asumen posturas a la defensivas cuando alguien les sugiere una serie de recomendaciones para mejorar las “performance” artísticas pero además, los periodistas, realizan entrevistas procurando lograr de sus entrevistados la confirmación de sus propias hipótesis.
Por otro lado está la descalificación permanente a quienes tienen visiones diferentes sobre la realidad actitud que sugiere un grado de autoritarismo verbal nunca visto en la sociedad nacional.
Resulta emblemático en este sentido, el mal momento que tuvo que vivir la Dra.cubana Hilda Molina en el Congreso de la Nación cuando, invitada por un grupo de parlamentarios, asistió al recinto con la intención de exponer sobre la situación de su país lo cual derivó en una acalorada discusión con grupos que se oponían a su experiencia y vivencia de la realidad cubana.
La Dra. Molina consideró que "la población cubana está enferma y psicológicamente desgastada" porque "no se pueden vivir 50 años sin libertad" y agregó que en la isla hay una "excelente salud para extranjeros y funcionarios" ya que "si uno paga, recibe mejores servicios". Sin embargo, un joven, con la inmadurez propia de su edad, increpó a la Dra. Molina y le replicó diciendo que “el mes que él estuvo en Cuba”, le permitían asegurar que lo que la Dra. decía no tenía fundamentos. A tal enfrentamiento se sumó la sra. Estela de Carlotto, activa militante de las Madres de Plaza de Mayo, quien le recomendó “llamarse a silencio y disfrutar de su familia”
Opiniones de Periodistas cree que sólo un diálogo respetuoso a los puntos de vista de los demás permitirá desentrañar dudas y lograr lo mejor de cada uno en la búsqueda de la excelencia humana.
Estamos convencidos que la intolerancia y la agresividad verbales sólo remiten a los comportamientos más prehistóricos del Hombre donde las desavenencias se arreglaba por la fuerza. Creemos que para crecer como sociedad es fundamental respetar la opinión del otro en especial cuando hay datos objetivos, como en el caso cubano, que informan sobre la realidad de la Isla. No en vano hay más del 10 % de la población en el exilio.
Desde esta columna apostamos fervientemente a realizar un análisis crítico sobre cómo nos estamos manejando en el campo de la comunicación y sostenemos que la objetividad de los análisis debe pasar, necesariamente, por los datos de la realidad.
La intolerancia y la agresividad verbal son actitudes propias de seres irracionales que pretenden desarticular a sus interlocutores con actitudes autoritarias y de desprecio a la opinión de los otros. Y creemos que esto no conduce a nada positivo.
La dialéctica, o sea, el arte de dialogar, discutir y argumentar requiere de una preparación intelectual que pocos están dispuestos a asumir. Sabemos que demanda esfuerzo y trabajo pero es la única manera que concebimos para el normal desarrollo de la sociedad.-

martes, 8 de septiembre de 2009

El País de España contra la ley de radiodifusión

El nuevo proyecto de ley de Servicios de Comunicación Audiovisual que ha puesto en marcha en Argentina el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner revela en su articulado la voluntad de algunos mandatarios latinoamericanos de utilizar el poder para favorecer un ordenamiento legal destinado a limitar, si es que no a silenciar definitivamente, las críticas adversas.
Hace muy poco, el fiscal general de Venezuela llevó al Parlamento una iniciativa mucho más agresiva: un proyecto de ley que abre la posibilidad de llevar a la cárcel a cuantos divulguen informaciones que "pueden atentar contra la estabilidad de las instituciones del Estado", una fórmula vaga en la que se podría escudar la represión de cualquier contestación a la revolución bolivariana que lidera Hugo Chávez.
El caso argentino no va tan lejos. Lo que empezó allí como una batalla contra el grupo Clarín por los derechos del fútbol, y que se presentó después como una medida estratégica para evitar la concentración excesiva de poder en algunos medios, ha terminado por convertirse en una propuesta fuertemente estatalista, que atomiza el sector privado y le obliga a depender de la arbitraria renovación de las licencias, válidas durante 10 años. Pasado el plazo, y como ya ocurrió en Venezuela, es fácil recurrir a la fórmula legal para cancelar los permisos de los medios díscolos.
También el Gobierno de Rafael Correa ha desempolvado una ley especial, que se estableció en Ecuador en 1975 durante la dictadura de Rodríguez Lara, para emprender procesos judiciales contra algunos medios.
En la Bolivia de Evo Morales se teme que en la anunciada reforma judicial que se producirá tras las elecciones de diciembre, en la que previsiblemente volverá a ganar, se incluya también un apartado que permita silenciar a cualquier rival.
Daniel Ortega, presidente de Nicaragua, fue muy claro este fin de semana: acusó a los periodistas de servir ´a los enemigos del pueblo´. ´Apaguemos el televisor y tengamos la mente limpia. No es necesario leer periódicos´ ha sido, por su parte, la fórmula de Correa que, como presidente de turno de Unasur, quiere proponer la creación de un organismo regional para vigilar el trabajo de los periodistas.
Agresiones físicas, acoso judicial, asfixia económica (negando publicidad institucional o subiendo los impuestos al papel), cierre de medios. El último paso de los regímenes populistas latinoamericanos es acomodar la ley a sus intereses y acabar con la libertad de expresión. Pero sin esa libertad no hay democracia, como no la hay si no se refuerza la independencia del poder judicial y se cultiva la pluralidad.
Algunas fuerzas de izquierda, que apoyan esta deriva autoritaria defendiendo que se hace con el apoyo del pueblo, deberían recordar que tan sólo con las urnas o con la voz directa de las asambleas no se construye una democracia. Para que funcione es imprescindible la libertad de expresión, el derecho de la minoría a discrepar y la fortaleza de las instituciones del Estado de derecho.
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sábado, 5 de septiembre de 2009

Los modales de los funcionarios públicos

Días atrás, desde este mismo blog Opiniones de Periodistas, les entregábamos un artículo publicado por el diario ABC de España, en el que se daba cuenta del escaso nivel cultural y académico de la clase dirigente de ese país.
En rigor de verdad, sorprende la cantidad de paralelismos que podrían establecerse entre ambos pueblos pues, si ese artículo hubiera sido escrito para el escenario político argentino, sólo habrían cambiado algunos datos.
En síntesis, “Analfabetismo y Política”, así se titula el artículo de Camacho, subraya que “La baja calidad de la democracia española no es casual. Llevamos años despreciando el mérito y el esfuerzo, y la política se ha convertido en un espacio del que huyen o al que rehúsan acercarse muchas personas capaces que no soportan el poder de la mediocridad.”
Desde el advenimiento la democracia en al año 1983 se han sucedido varios gobiernos y de distinto tinte político; eso no quiere decir que la dirigencia se ha ido renovando; antes bien, sucesivamente los dirigentes son siempre los mismos pero con los vicios propios de años de intrigas, contubernios, insultos, descalificaciones; en fin…características propias de la más baja política; la antítesis del verdadero estadista.
Sin embargo creemos que el paradigma de esta situación lo constituye el actual gobierno kirchnerista; hasta donde nosotros recordamos no ha habido gobierno que haya defenestrado, atacado, insultado y humillado de forma tan alarmante con sus epítetos descalificativos a todo aquel que se ha opuesto a su forma de manejar los destinos del país o a sus inflexibles opiniones.
Pero el colmo del gobierno actual han sido los modales demostrados recientemente por el Secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno que, por lo que ha puesto de manifiesto, no son los más correctos a la hora de negociar o llegar a un entendimiento con la sociedad.
En su reciente viaje a la localidad santacruceña de Las Heras para "verificar precios", dejó en evidencia por qué se ganó el mote de "Patota" al agredir verbalmente a la Presidente de la Cámara de Comercio de esa localidad, Susana Barrera, a quien –literalmente- echó de la reunión que mantenían junto a otros funcionarios nacionales y provinciales, después de golpear una mesa con el puño ante un cuestionamiento de la Sra. La Presidente de la Cámara de Comercio, había sido invitada junto a otros comerciantes locales, a un encuentro con el Secretario de Comercio para hablar de un programa de control de precios.
Continuador del estilo actual con el desprecio por el protocolo que desde Néstor Kirchner hasta su esposa han sabido demostrar en estos años de gobierno, después de hacerla esperar dos horas a que los atiendan, ingresaron al encuentro.
En la reunión estaban Moreno, un secretario de Julio de Vido, y los intendentes de Las Heras y Pico Truncado. Luego de darle la bienvenida, la Sra. Barrera comenzó a hablarles de los problemas de la localidad cuando Moreno la cortó en seco.
"Yo le quería contar de la crisis petrolera, de la falta de obra pública, de la desocupación, pero él se enojó, golpeó la mesa y me dijo que del petróleo no podía hacer nada". “Actuó como un ciclotímico, golpeó la mesa, se puso a gritar", describió Barrera, quien agregó que Moreno le aseguró que él no había llegado a "consensuar con nadie".
"¿Sabes quién soy yo? le increpó Moreno. Yo vengo de parte de la Presidente; no a consensuar, sino a poner en vigencia el control de precios", le recriminó Moreno a la mujer, a quien luego echó de la reunión ante la pasividad total de los intendentes y funcionarios que no hicieron nada al ver cómo éste la "patoteaba". "Todos se callaron, ese es el poder de Moreno: tiene el poder de gritarle a una mujer, callarle la boca y que nadie diga nada", se lamentó la comerciante de Las Heras.
Todo lo demás es anecdótico. Barrera confesó que su primera impresión de Moreno no fue la mejor. "Es como todos dicen, ahora entiendo a las personas de campo", remató la dirigente, quien aseguró que los ciudadanos de Santa Cruz son rehenes de la interna que existe entre el gobernador Daniel Peralta y Néstor Kirchner.
Desde Opiniones de Periodistas queremos poner de manifiesto que entendemos que estas actitudes prepotentes y patoteriles no conducen a nada alentador.
Que sólo generan ánimos enardecidos porque los ciudadanos creemos que el gobierno debe ser el primero en procurar contemporizar una situación, dialogar, buscar consensos y acuerdos para el normal desarrollo de la sociedad.
Desde esta columna apelamos a que la clase dirigente asuma una actitud más responsable con la misión que les toca desempeñar y eviten manejar los destinos de los argentinos como si de un encuentro de patotas se tratara.
Creemos en los buenos modales y en las formas para establecer diálogos civilizados que permitan lograr puntos de encuentros para resolver los problemas que nos afligen como sociedad; los exabruptos y gestos de mala educación deberían reservarse para otros escenarios (si alguno cree que ellos conducen a algo positivo).-

martes, 1 de septiembre de 2009

Analfabetismo y Política

ABC.es
Madrid - 31-8-2009

Analfabetismo y política - Ignacio Camacho

NO está escrito que para ser un buen político haya que poseer un currículum académico brillante.

Ni Suárez ni González, por poner dos ejemplos de personas especialmente bien dotadas para el arte de la política, fueron estudiantes destacados, pero parece evidente que el nivel medio de la clase dirigente de un país será tanto más alto cuanto mayor preparación reúna.
En Francia, una nación de sólida tradición educativa, las Escuelas Técnicas de la Administración han provisto al Estado de un cuerpo de dirección que
- garantiza la buena gestión y
- la continuidad de un servicio público competente.
El panorama en España es más bien desolador, porque el excesivo peso de la partitocracia ha poblado la política de militantes sin mayor mérito que el de la permanencia y la obediencia, incapaces en su mayor parte de competir con éxito en un mercado de trabajo igualitario.
Un estudio reciente del Ministerio de Política Territorial, que dirige Manuel Chaves, ha puesto negro sobre blanco esa indigencia de estudios:
- la mayoría de nuestros alcaldes y concejales sólo tiene la EGB o estudios elementales equivalentes, un 22 %;
- el 13% ha alcanzado el bachillerato y
- sólo un 13,28% ha cursado alguna licenciatura.
Los datos son pavorosos habida cuenta de que el poder local es la principal estructura política de la administración española. Y aunque el bajo nivel puede ser relativizado por el hecho de que en la estadística se incluyen los ediles de todos los pueblos y municipios pequeños, la extensión de la educación en España permitiría pensar en una mayor cualificación de la dirigencia pública.
Resalta, por otra parte, el hecho de que la cuarta parte de los encuestados se negó a ofrecer información sobre sus estudios, lo que invita a la conclusión de que no se siente muy satisfecho con ellos. Es decir: que el 50 % de los políticos municipales en España tiene una formación insuficiente.
La relevancia de este panorama es grave por cuanto
- informa del deficiente grado de competencia de nuestra política, y
- puede explicar al menos en parte la venalidad de muchos ediles y
- el alto nivel de corrupción del poder local, que ha sido resaltado en algunos informes internacionales.
Una clase política funcionalmente analfabeta resulta letal para un país. Téngase en cuenta, además, que el ámbito municipal es la cantera de la política parlamentaria y autonómica, y que son muchos los alcaldes y concejales que al cabo de un cierto tiempo de permanencia en sus cargos se sienten habilitados para dar el salto a un escenario mayor, apoyados en el control que sus parcelas de poder les ofrecen sobre las organizaciones locales y provinciales de sus partidos.
En este contexto, la eterna polémica sobre el salario de los políticos no debe centrarse en
- los diputados al Congreso o
- los miembros del Gobierno y los altos escalones de la Administración del Estado, por lo general retribuidos con escasa generosidad.
Es en las autonomías y municipios
- donde vegeta una tropa mal preparada,
- con pocos estudios o ninguno, que suele ganar en el ejercicio de la política
- más dinero del que su preparación les permitiría obtener en cualquier otro trabajo a su alcance.
La baja calidad de la democracia española no es casual. Llevamos años despreciando el mérito y el esfuerzo, y la política se ha convertido en un espacio del que huyen o al que rehúsan acercarse muchas personas capaces que no soportan el poder de la mediocridad.